Por si no estáis demasiado puestos en las sutilezas del final, os aclararé que el caballo se las arregla solo para detener un peón (siempre que llegue a pararlo, por supuesto), salvo si es de torre y ha llegado a la 7ª fila. El caso más interesante se da con el peón de torre en la 6ª fila:
Este finalito tiene cierto interés histórico para el ajedrez cántabro: en el Campeonato de España Escolar de 1995, nuestras niñas estaban peleando por la medalla de oro, y Rosabel López defendía una posición que sólo podía entablarse simplificando hacia este final. Isidoro y yo, que actuábamos como delegados de la selección, desconfiábamos bastante del desenlace, pero Rosabel sabía (o encontró) el mecanismo defensivo:1...Rg3 2.Cf1+ Rg2 3.Ce3 Rf2 4.Cg4 Rg3 y parece que el caballo tiene que alejarse, pero con 5.Ce3! el doble en f1 aclara la situación.
Al final nuestra selección femenina consiguió el triunfo en el campeonato, en no poca medida gracias a esta posibilidad de tablas.
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